¿Qué significa el desorden en tu vida y en tus espacios?
¿Alguna vez te has puesto a pensar que significado tiene la acumulación de cosas?
La acumulación de cosas, a la que comúnmente le llamamos “Desorden” está relacionado con diferentes clases de miedos, como miedo al cambio, a ser olvidado o a olvidar y a la carencia. Además de los miedos el desorden simboliza confusión, falta de enfoque, caos, inestabilidad y puede significar incertidumbre acerca de tus metas, tu identidad o lo que quieres de la vida.
Un aspecto para tener en cuenta en el momento de analizar el significado del desorden es el lugar de la casa en el que se encuentra, ya que esto nos dará información sobre qué área es “problemática” en tu vida (de esto te hablaré en la siguiente publicación).
La acumulación de demasiados objetos transmite una energía que genera saturación de ideas y confusión para definir y estructurar nuestros proyectos y planes, por lo tanto, altera el camino para obtener nuestras metas, bloqueando las oportunidades y haciéndonos perder tiempo.
Has una inspección rápida (mentalmente) y piensa: ¿Has guardado objetos rotos o dañados por un buen tiempo pensando que algún día los vas a arreglar? Pues esta acción simboliza promesas y sueños rotos y si se trata de electrodomésticos, artículos electrónicos, muebles y los tienes ya sea en la cocina o en el baño, significan problemas de salud y riqueza.
En los casos en los que tenemos antigüedades u objetos heredados, éstos se impregnan de la energía de aquellas personas a las que han pertenecido, por lo tanto, te recomiendo hacer un ritual de limpieza que puede ser con incienso o con aceites de esenciales naturales de algún cítrico como naranja, limón, toronja o mandarina. En lo posible, cualquier objeto que llegue a tu casa debería ser limpiado energéticamente ya que no sabes por cuantas personas ha pasado ni la calidad de sus vibraciones (en otra publicación te hablaré acerca de cómo efectuar una limpieza energética).
Podemos clasificar el desorden en Nuevo y Antiguo:
• Desorden nuevo: Es probable que te encuentres en un momento de la vida en el que estés haciendo demasiadas cosas a la vez y que no te estás enfocando en lo que debes hacer por lo tanto has perdido la dirección. Este tipo de desorden incluye ropa amontonada, juguetes o artículos deportivos puesto en cualquier lugar, cosas que has usado recientemente y que no has vuelto a poner en su lugar, etc. Casi todos tenemos en nuestro hogar este tipo de desorden en alguna medida por la forma acelerada en que vivimos. Organizar este tipo de desorden cuanto antes te ayudará a ser una persona más centrada y efectiva en tu vida diaria.
• Desorden antiguo: Tiene relación con objetos que no has usado desde hace un largo tiempo y que están acumulados en la bodega, ático, garaje, armarios, muebles que no abres con frecuencia, papeles de trabajo viejos, cuadernos de apuntes del colegio o de la universidad muy antiguos y documentos en tu computador que ya no usas o que ni te acordabas que los tenías o peor aún, que cuando los necesitas no tienes ni la más remota idea del lugar en el que quedaron archivados, revistas de hace más de 6 meses o ropa que no te has puesto en más de un año. Esto podría ser reflejo de que estás viviendo en el pasado, quizás dejando que tus viejas ideas y emociones se apoderen de tu presente, así que presta atención ya que podrías estar evitando que nuevas oportunidades y personas entren en tu vida.
10 cosas súper prácticas que puedes hacer hoy mismo para controlar el desorden:
1• Deshazte de lo más grande primero: la máquina de hacer ejercicios que solo usas para secar la toalla o el oso gigante de peluche que conservas desde la época de colegio (y que además debe estar acumulando mucho polvo).
2• Devuelve las cosas que te hayan prestado como libros, ropa, herramientas, artículos de cocina, etc.
3• Levanta todo lo que esté en el suelo y colócalo en un canasto o bolsa hasta que puedas tomarte el tiempo de poner cada cosa en su sitio o de clasificar adecuadamente.
4• Reúne revistas, catálogos y periódicos en una bolsa o canasto.
5• Elije del armario 10 prendas que no hayas usado en el último año y dónalas. Aprovecha el cambio de estación para no guardar ropa que ni miraste durante la temporada que acaba de terminar.
6• Limpia las ventanas, es una manera figurativa y literal de dejar entrar la luz a tu vida. Te aseguro que ver los vidrios impecables te dará un nuevo aire y te hará sentir feliz.
7• Desocupa los cestos de basura de baños, cocina y oficina ya que representan cosas que ya no necesitamos ni queremos en nuestras vidas.
8• Saca de los cajones de tu armario los calcetines sueltos que han perdido su par, puedes usarlos para limpiar muebles.
9• Despeja el escritorio desecha papeles que ya no uses y archiva los que te serán de utilidad más adelante.
10• Revisa lápices y marcadores que no funcionen y dales las gracias por su servicio y despídete de ellos.
Bueno, y aplica el siguiente lema: “Entre menos objetos, menos polvo habrá que limpiar”, y aunque suene gracioso, te cuento que siempre que veo algo de todo mi gusto para mis espacios, durante mi intención de compra me pregunto si realmente “necesito” tener ese objeto y si tengo un buen lugar para colocarlo según mi Feng Shui y esta frase siempre llega a mi mente para ayudarme a tomar la decisión acertada. Te recomiendo que la apliques porque funciona bastante bien.
En resumen:
Tienes el poder de transformar tus espacios en lugares sagrados, de reconciliarte con ellos y de amarlos. Verás que una vez armonizados, se convertirán en tus sitios favoritos, en donde encontraras más sentido a tus días descubriendo que cada vez eres una persona más asertiva en tus decisiones y más creativa en tus planes y proyectos siguiendo estos simples pasos:
1er paso: Entender mi desorden, comprender que estoy recibiendo una señal y que existe una razón o emoción por la cual lo generé.
2do paso: Acomodar y ordenar todo lo que está desordenado despejando el espacio.
3er paso: Limpiar y armonizar la energía de mis espacios de vida, así yo podré estar en equilibrio también.
¡Te dejo un abrazo!
Moni de Expande tu Latido